En verano, es probable que, en ocasiones, hayas notado una extraña y no muy agradable sensación al ingerir alimentos demasiado fríos como helados, granizados o refrescos. Esta sensación se llama sensibilidad dental y se produce cuando los distintos estímulos externos afectan al nervio dental, generando pequeños dolores o molestias transitorias.
Por eso, hoy os traemos cuatro consejos para prevenir la sensibilidad dental:



